Desde hace un tiempo ya, viene rodando la noticia de que un
hotel está recorriendo algunas ciudades del país, dejando en cada una de ellas
sus historias, algunas nuevas y otras conocidas por los asistentes. El
recorrido es personalizado por sus anfitriones y siempre es distinto, ya que el
orden de las habitaciones no esta prestablecido.
El pasado 3 de Noviembre fue el turno de Cumaná para conocer
al hotel, su nombre es Miramar y los anfitriones, Tomates Fritos.
Los Tomates dieron su acostumbrado show cargado de energía y
de las introducciones a algunas de las canciones, para hacer una experiencia
común a los asistentes. El viaje siempre es el mismo, sea en un local como en
una gran tarima de espacios abiertos, el misticismo de la banda siempre se hace
notar, muy buena ejecución.
A modo personal debo confesar que tenía ciertas reservas a Hotel
Miramar, no por su calidad, sino porque aun me encontraba estancado en Hombre
Bala, el cual me sigue pareciendo un gran
disco, logrado casi a la perfección. Temas como Hombre Bala con ese excelente
intro, para luego explotar de esa manera. Otro de los tantos ejemplos es Sister Saigon,
todos temas difíciles de superar.
La única manera de despejar dudas fue visitar personalmente
el Hotel y de que manera las dudas fueron despejadas, por ejemplo, escuchar Granola en vivo, es como una patada, el tema
tiene una fuerza increíble. La experiencia en vivo, es como un turbo para
completar el disco.
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